martes, 10 de marzo de 2015

NOTICIAS DE VARGAS VILA: EL PANFLETARIO





03 de julio de 2015
    Manual del Perfecto Solitario (Fragmento)
    "Ser solitario, es la sola manera de no ser solidario en los dolores y en los errores de los otros; suframos solos nuestro injusto dolor, este vil dolor de animales castigados por el destino, penetrables a la influencia del dolor ambiente, desarmados ante la vida hostil y mala, que ella misma no sabe el por qué de su crueldad, y por eso nos hiere con tanta brutalidad como inconsciencia; aquel que busca la soledad, no teme la hostilidad de la vida; la desprecia. ¿Cómo puede ser herido un solitario? Él no teme el dolor, porque puede darse la muerte; y no teme la muerte, porque es el fin del dolor. ¿Dios? No hagáis reír al Solitario; el Solitario y Dios, se vuelven mutuamente la espalda".


02 de julio de 2015
    Si la biografía del escritor francés más importante la escribió un ensayista francés y la del genio alemán un biógrafo alemán, ¿por qué la biografía del más extraordinario escritor colombiano no habría de escribirla un pensador colombiano? Es cierto, yo no soy filósofo; voy un poco más allá: me gusta hacer de filósofo de la historia. Ese será mi crimen, como dice el maestro; y ese, es tal vez el crimen más imperdonable, pensar.
    Y pensar como Vargas Vila, tiene sus riesgos; el filósofo dice: “a mí también me enseñaron a dudar; esa es una de las cosas que no le perdono a la servil humanidad”. Pero la tradición se impone, por lo menos en el estilo de concebir las ideas; y la voz de Vargas Vila, surge como un grito que censura desde el París de los expatriados; y el máximo satírico francés del siglo XX, habla; tal vez lo que quiso decir Anatole France de Vargas Vila, es que el panfletario era tan grande como cualquier moralista francés.

LAS 10 MÁS GRANDES OBRAS DE VARGAS VILA:

La república romana
El canto de las sirenas en los mares de la historia
Libre estética
En las cimas
Ante los bárbaros
Los césares de la decadencia
Ibis
Flor de fango
El alma de los lirios
El camino del triunfo

Estas son las diez obras más importantes de Vargas Vila, además de los tres libros escritos basados en sus diarios y obras de meditación:
Diario secreto por Consuelo Triviño;
Diario (de 1899 a 1932) por Raúl Salazar Pazos;
Pensamientos de Vargas Vila por Esteban Blandón.

obras de Vargas Vila

20 de junio de 2015
    Los hombres de la calle son lo que queda del cavernícola; se diría un cavernícola con cerebro. El Genio, comprendió un día, que él es una especie de neurótico, eso que la sociología llama, un loco… y las fuentes se hicieron para que se asearan los hombres de la calle.






23 de mayo de 2015
    Todo hombre que por su grandeza mental sobrepasa el nivel común, desequilibra el medio y la época en que actúa; es necesario que se haga un solitario, para no hacerse un criminal. Vargas Vila – Diario.


15 de mayo de 2015
    Según la tradición judeo-cristiana, el amor de Dios ha de ser una tortura infinita; ¿y voluntaria?


14 de mayo de 2015
    El egotista dice: soy elocuente, porque hablo de mí mismo. 


23 de abril de 2015
      A propósito de Joseph Mallord William Turner (23 de abril de 1775- 19 de diciembre de 1851)
    Impresionismo: movimiento pictórico francés de finales del siglo XIX que apareció como reacción contra el arte académico. El movimiento impresionista se considera el punto de partida del arte contemporáneo. El paisajista inglés Joseph Mallord William Turner (1775-1851), es tal vez el más importante de sus precursores. Cuando Monet y Pissarro vieron por primera vez sus obras en 1871, se sintieron conmovidos por la atmósfera y los efectos difusos de luz característicos de la pintura de Turner.





AUTORRETRATO

 “¿Veis un jardín de Turner?
Es una confabulación de oros divinos;
Una aurea coloración hecha de los cabellos de una aurora;
¡Qué opulencia de rosas! Se dirían caídas de una dalmática papal;
Los lirios marescentes, como hechos de un cristal solar;
En el azur grave de una gran melancolía;
Verdes de luna, haciendo mágicos los árboles;
Céspedes como metálicos, desgarrados por el rojo violento de los claveles;
Cielos de octubre, de ámbar y cinabrio, opulentos de esplendida tristeza;
El alma del otoño sollozando, y el alma del crepúsculo muriendo;
Y por sobre todo eso, el alma de Turner, esa alma de orgullo y soledad, tendiendo el ala.
¿No amáis ese sensitivo exquisito y apasionado que fue Turner?
¿Nada os dice la tristeza vaga y misteriosa de sus jardines, la opulencia divina de sus cielos otoñales, la orfebrería sutil de sus calmas florales, el oro mórbido de sus rosas desfallecidas?
¿Amáis mejor los cielos fastuosos del Tiziano, las apasionantes coloraciones del Carracci, las violentas tonalidades de Guido Reni?
¿Os seducen los horizontes pálidos, las lejanas albas delicuescentes, los prados conventuales donde se abren flores de nácar bajo altos cielos de alabastro?
¿Amáis los primitivos?
No temáis decirlo;
Cada uno tiene  la estética de su propio temperamento;
Yo amo mucho a Turner, y quisiera para mi tumba, uno de sus jardines penumbrosos, misteriosos, que el silencio va envolviendo lentamente en un manto sideral…
Y las rosas van cayendo suavemente,
Suavemente,
Como besos escapados de la boca del rosal”.
Vargas Vila – Del rosal pensante, 1914


22 de abril de 2015
    A proposito de Gabriel García Márquez
    “Siempre las circunstancias ásperas, frustrantes, a veces humillantes de su vida lo empujaron hacia la máquina de escribir movido por una oscura y ardiente necesidad reivindicativa de sí mismo. También esas circunstancias duras, le dieron un espesor humano, una ternura viril, un sentido de la solidaridad muy profundo. No hay duda: sus mejores libros y sus mejores amigos nacen de esta privilegiada relación suya con la verdad de la vida”. Plinio Apuleyo Mendoza, La llama y el hielo; Planeta-1984


16 de abril de 2015
    A propósito de Anatole France (París, 16 de abril de 1844 - 12 de octubre de 1924). Escritor francés, premio Nobel 1921. Autor de El crimen de un académico, El lirio rojo, el jardin de Epicuro, Los dioses tienen sed, entre otras.
    Es cierto que France hace en sus novelas de crítico, ensayista, biógrafo y hasta filósofo, pero sus obras no son una excusa para exponer ideas estéticas o narcisistas de esas que tanto chocaron a los españoles de finales del siglo XIX. La novela de France no es una novela decadente ni mucho menos de ideas; es una novela libre, eso que alguien llamó novela culta. Dentro de la obra ensayística de France, sus novelas son tan relevantes como su obra crítica o reflexiva. A diferencia de los románticos y algunos modernistas, la sed del martirio no lo consumía, aunque dejara entrever sus coloquios con Jeremías y Ezequiel.
    Como libertario, France es un polemista satírico y anticlerical; como prosista, es un esteta de formas clásicas y refinadas. Unas veces pesimista: “nada ensancha tanto el espíritu como el dolor”. Otras sensualista: “no sientes por mí sino un amor sensual. No me quejo de ello, pues es quizá el único amor cierto”. Otras decadente: “la belleza es dolorosa; por eso, desde que mi vida es hermosa, sufro”. Otras vehemente: “es la flor de su carne la que produce ese mal incurable de amar”. Otras realista: “lo que prueba que la República es el mejor de los gobiernos, es que en 1871 pudo fusilar en una semana a sesenta mil insurgentes sin volverse impopular. Después de tal represión, todo otro régimen se hubiera hecho imposible”. Otras poeta: “los bellos movimientos, son la música de los ojos”. Otras veces, un intelectual comprometido: “los judíos, que instruyeron y civilizaron a Europa, son los únicos que pueden salvarla del mal evangélico que la devora. Pero han faltado a su deber: se han hecho cristianos entre los cristianos. Y Dios los castiga. Permite que se le los exile y se los despoje. El antisemitismo sigue haciendo espantosos progresos. En Rusia, mis correligionarios son casados como bestias salvajes. En Francia, los empleos civiles y militares se cierran para los judíos. No tienen ya acceso a los círculos aristocráticos. El antisemitismo, téngalo ustedes por seguro, es la muerte de la civilización europea”. Y en sus momentos de mayor lucidez intelectual, un profeta: “el Papa, despojado y pobre, será poderoso. Agitará al mundo. Se volverá a ver a San Pedro, a Lino, a Cleto, a Anacleto y a Clemente, a los humildes, a los ignorantes, a los santos de los primeros tiempos, que cambiaron la faz de la tierra. Si mañana ocurriera lo imposible y en la cátedra de Pedro se sentara un verdadero obispo, yo iría a él para decirle: “No seáis el anciano sepultado vivo en una tumba de oro; dejad a vuestros camareros, a vuestros guardias nobles, a vuestros cardenales; dejad vuestra corte y los simulacros del poder. Venid de mi brazo a mendigar vuestro pan para los pueblos. Cubierto de harapos, pobre, enfermo, agonizante, recorred los caminos mostrando en vos la imagen de Jesús. Decid: ‘mendigo mi pan para condenación de los ricos’. Entrad en las ciudades y gritad de puerta en puerta con sublime estupidez: sed humildes, sed pacientes, sed pobres. Anunciad en las ciudades tenebrosas, en los albergues, en los cuarteles la paz y la caridad”. Se os despreciara, se os lapidará. Los gendarmes os arrastrarán a la cárcel. Seréis, para los humildes y para los poderosos, para los pobres y para los ricos, motivo de ludibrio, de asco y de piedad. Vuestros mismos sacerdotes os depondrán y entronizarán contra vos a un antipapa. Dirán todos que estáis loco. Y es preciso que digan la verdad, es preciso que estéis loco. Los locos han salvado al mundo. Los hombres os pondrán la corona de espina, os darán el cetro de caña y os escupirán a la cara. Pero en esos signos pareceréis Cristo y verdadero rey; y por tales medios estableceréis el socialismo cristiano, que es el reino de Dios sobre la tierra”. Pero ante todo, un hombre sincero: “no me creo tan desprovisto de talento para ocuparme de política”.


13 de abril de 2015
    A propósito de Juan Montalvo, (Ambato, Ecuador, 13 abril 1832 – Paris, Francia, 17 enero 1889) Autor de Las catilinarias,  Siete tratados y Capítulos que se le olvidaron a Cervantes.

    Yo me he atrevido a asegurar que Juan Montalvo es el primer escritor modernista de Hispanoamérica. ¿La razón? En un movimiento de emancipación, las ideas son más importantes que los sueños. Rubén Darío no dejó de ser más que un sueño lírico para convertirse en el alma de un movimiento poético. Modernistas le llamaron a esos francófilos que como él, soñaban revolucionar la literatura. Ese fue nuestro primer boom; un boom poético. Como muy bien lo aseguró Anatole France en la obra que cambiaría el rumbo de escribir novelas en Francia: el verso, muy sencillo, violento y alegre, era, en definitiva, el único lenguaje que convenía al pueblo. La prosa sólo agradaba a la gente de una inteligencia muy sutil. Es probable que los críticos del modernismo nunca supieran en verdad a qué se le podía llamar prosa modernista. Y es al historiador del grupo al que le corresponde prologar las obras completas de Juan Montalvo, el venezolano Rufino Blanco Fombona, quien así escribe sobre el escritor ecuatoriano: “Montalvo no ha sido ni será nunca escritor popular. Su prosa lo condena a ser más admirado que leído. Al vulgo no llegará nunca. Es un literato para literatos. Para gustar su prosa amanerada, solemne, sabia, se necesita de iniciación. Esto no indica demérito. También se necesita de iniciación para comprender la poesía de Homero, que sin embargo fue popular en su tiempo, la pintura de Rembrandt y la música de Wagner”. “El Ecuador puede estar orgulloso de haber dado a la América tal hijo. Esta tierra de volcanes produce temperamentos volcánicos. No tiene el Ecuador la fecundidad de otros países americanos para producir hombres de letras. La tierra duerme un buen espacio de tiempo; pero es que ciertos alumbramientos necesitan gestación prolongada; y en Ecuador, después de un Olmedo, nace un Montalvo”. “Disculpándose de por qué acometió la empresa de continuar el Quijote en los Capítulos que se le olvidaron a Cervantes, Montalvo pinta su Ecuador nativo y arguye que el medio grandioso predispone a los atrevimientos intelectuales”. “La actitud inapeable del batallante le dio una autoridad moral inmensa en el Ecuador. En Montalvo se fijaron todas las miradas: era el centro y la esperanza de la opinión radical”.

“¡Oh locura!, tu eres como la pobreza, heredad fácil de cultivar, no sujeta a los amigos, ni expuesta a la envidia y la venganza de ruines y perversos. El demente cuyo desvarío es agradable, es más feliz sin duda que el hombre cuerdo cuyas verdades son su propio tormento y el de sus semejantes.” Capítulos que se olvidaron a Cervantes

ALGUNOS AFORISMOS:

La ignorancia suprema, es bestia apocalíptica.

 La historia no existe para los ignorantes; para los que no leen, nada ha sucedido en el mundo.

Ignorante a quien favorece la fortuna, es enemigo mortal de la sociedad humana.

Inteligencia sin cultivo es ineptitud.

Cuando el tirano habla de mí, verbigracia, su discurso es un arrebatado torrente de hipérboles, de figuras que me levantan mucho más arriba de adonde he llegado por mis merecimientos.

El que no tiene algo de don Quijote, lo vuelvo a decir, no merece el cariño ni el aprecio de sus semejantes.

La verdad es como el oro: puede hallarse, y se halla entre montones de escoria.

La historia es la enseñanza del porvenir; ignorar los tiempos pasados es no ser aptos para los venideros.

Los hombres de genio han absorbido los rayos del sol, y donde ha resplandecido un sabio, mil ignorantes le han estado afligiendo con su obscuridad alrededor.

El género humano tiene mil defectos de armadura: el filósofo, el moralista pueden herirle por mil partes con sus flechas.

Regla general de la elocuencia: instruir deleitando, y deleitar instruyendo.

Napoleón le prohibió al papa castrar muchachos para el canto del Miserere.

Hubo un momento en la historia en la que el papel era más importante que la razón.

Regalo mi biblioteca a quien escriba un libro de aforismos. Hay que poner de moda el aforismo; hay que hacer decir a la gente cosas inteligentes.


13 de abril de 2015
    Vargas Vila habló del hombre como no lo ha hecho ningún siquiatra. Tratadista de tiranos; hombre de la tierra y también del universo; maestro del panfleto; rey del aforismo.


12 de abril de 2015
    "El tío Lucas era casado, tenía muchos hijos. Su mujer llevaba la maldición del vientre de los pobres: la fecundidad". Rubén Darío

    "Sobre la tierra no hay más que un poder definitivo: la inteligencia humana. El derecho mismo, ejercitado por gentes incultas, se parece al crimen. Los hombres fuertes que se sienten torpes, se abrazan a las rodillas de los hombres inteligentes". José Martí

    "La mitad de los viajeros que salen de París, no tienen en todo el viaje más que un placer, y es el de volver a París". Enrique Gómez Carrillo

     "¡Hombre de poca fe!, ¿qué sabes tú lo que hay acaso dentro de ti mismo?" José Enrique Rodó

    "Yo existo fuera de la academia". Juan Montalvo

    "Las leyendas son a veces la única verdad de la historia". Rufino Blanco Fombona

     "Des Esseintes no experimentaba deseo alguno de implorar a un Dios cuya misericordia le parecía muy poco probable". Joris-Karl Huysmans 

    "La Biblia, ese libro prodigioso y sombrío, lleno de sublimes cimas desde donde los más altos pensamientos, en cada instante, uno tras otro, levantan el vuelo como las águilas". Víctor Hugo
 

09 de abril de 2015
En el día de mi cumpleaños.
    Agradezco a la vida y a su mística sabiduría, estos años de angustiosa existencia, que por angustiosos han hecho de mi sensibilidad la lógica de mi fe; la realidad nunca será el epígrafe de mi existencia; el deber será mi ensueño, y el yo, el primer capítulo de mi ética. Continuaré mi viaje, teniendo como excusa la pasión de la verdad, y cual corsario en busca de quimeras, espero algún día conquistar ese Himalaya de propósitos que impulsa mi vida, y habitar esa cima, cual sombra de águila.
    El arte siempre estará de plácemes cuando se trate de expresar nuestros sentimientos con palabras y de ofrendar nuestros agradecimientos a la vida, así la vida, no sea más que un anestésico dolor.


06 de abril de 2015
    Así como Julián Sorel, Lucien de Rubempré y Philip Carey son Stendhal, Balzac y Maugham, Vargas Vila es Luciano Miral, León Vives y Froilán Pradilla. Una novela no es una autobiografía, dirán los entendidos, aquellos que saben cómo se escribe un libro pero que no son capaz de escribirlo. En la medida en que sus narraciones son una proyección de la imaginación, podemos decir que nuestro autor también es Luisa García, o la mismísima Silvia Krauss Salvatti. Es por ello que el Vargas Vila novelista que más me gusta, es, el que escribe su propia biografía.


27 de marzo de 2015
    Si Vargas Vila era, al decir de Darío, ante todo un poeta, y América lo proclamaba como el más grande libelista del Hispanoamérica, ¿por qué escribió novelas el panfletario? Únicamente porque era un egotista, Vargas Vila habría de concebir sus novelas; allí se narra la vida, no siempre imaginaria, del escritor. El Maestro de Ibis, es el mismo nihilista de La tragedia de un hombre libre. Todos los hombres son Vargas Vila, y Vargas Vila es todos sus héroes.

    ¿No es el encaje una joya silenciosa? dice la beguina sor Úrsula; ¿no os parece genial este prodigio de modernismo simbolista en la voz de Rodenbach?


24 de marzo de 2015

    Gabriel García Márquez no fue más que un eclipse en la vida de ese sol que se llama José María Vargas Vila. Y una vez muerto el eclipse…  No hay derecho a creen en la eternidad de los eclipses, sentenciaba Vargas Vila el mismo año en que nacía en un pueblo de la costa norte colombiana el más universal y querido de nuestros escritores. Pero sólo uno, al que la circunspección hace que llamemos nuestro genio, seguirá alumbrando el firmamento de las ideas con su prodigioso pensamiento libertario. Es un excelente momento para resucitar a Vargas Vila, me ha dicho un arruinado editor. Y yo le digo a este: No sea malo con el costeño; él sólo era un mamagallista. Y el antiguo librero me responde: y todavía hay quien cree que no era más que un alucinado poeta, como pensaba Darío; pero Darío se equivocó; el maestro era: el Panfletario; una especie de meteorito que un día fue a estrellarse contra las llanuras de la gramática y el dogma; ¡y no es mamadera de gallo!
    Así como los pontífices de las academias se atreven a decir que un novelista no puede ser ni inmoralista ni irreverente, también deberían excomulgar aquellos que como García Márquez han hecho del mamagallismo un hábito literario. Pero como ese es un tema para cronistas de revista, lo dejamos ahí.
Pensando en esa manera de hacer literatura, o genios, se da uno cuenta por qué este país nunca ha producido un filósofo serio. Vargas Vila no pasa de ser un indignado al que asocian con la solemnidad y el conservadurismo de nuestros eruditos. Un hombre que sólo sabe odiar no puede ser un filósofo, me dirán algunos. Uno que odia no, seguramente, pero sí uno que sabe decir la verdad.
    Ya lo he dicho en varias oportunidades; El otoño del patriarca no es un prodigio de novela, es un experimento, un gran experimento de novela. Eso es lo que en lenguaje garciamarquiano se llama: mamar gallo. Como entretención de críticos y versados antologistas de obras maestras, García Márquez es todo lo épico (maravilloso) que se le quiera. Pero yo, al igual que Vargas Vila, soy un pensador, y como tal, escudriño, no allí donde la imaginación concibe un hecho literario, sino, donde la idea se revela como un arma de combate.
 

16 de marzo de 2015
    Para muchos ensayistas, el modernismo fue simple y llanamente un estilo poético. Para la historia de la literatura también lo será. Su precursor: ese bardo llamado Rubén Darío. Como sucedió con el vargasvilismo, el modernismo no tuvo sucesores ni alentadores –que sí imitadores– especialmente en Colombia. Con la muerte de esos dos genios del idioma, la palabra calla vencida en su emancipación. ¿Qué estoy equivocado? Sea. Yo no quiero decir lo que por cronología intelectual le corresponde a otros. Nada que ver con mi lógica de alucinado y este pesimismo que no es más que un reflejo de mi crisis estético–existencial. ¿De qué se trata esta crisis? Kierkegaard se los explicará. Yo no tengo tiempo para eso. Léase el concepto de la angustia por Vigilius Haufniensi. Una nueva lectura de Vargas Vila, me urge; sólo releyéndolo he podido comprenderlo. Nada justifica su defensa; Vargas Vila es un hombre libre, y como tal, actúo. Yo sólo puedo ejercer una de las tantas cosas a la que nos obliga el heroísmo de los hombres; una de ellas, la admiración. Apasionada. Sea. Siempre he sido un admirador de la elocuencia en los tribunos; Vargas Vila lo es en el epíteto. ¡Exceso de adjetivación! me gritarán algunos. Puede ser. Lo cierto es que nadie se sirvió tan bien de la palabra para hacer de su elocuencia, un genio. Y el genio habló: en 1926 publicó en La Habana, Cuba, El canto de las sirenas en los mares de la historia. Es decir, la génesis de la elocuencia; los historiadores, tribunos y profetas en la historia. De ellos, el judío asquerosoes el menos afortunado de cuantos creyeron ser apóstoles de una verdad.


13 de marzo de 2015
    Leyendo algunos textos sobre ciertos pensadores anarquistas, o acráticos como gusta llamarlos el poeta Jesús Lizano, me doy cuenta que Vargas Vila no es un escritor para manuales de literatura; Vargas Vila es, como lo asegura el ensayista Ricardo Sánchez, un patriota latinoamericano que está a la altura de cualquier combatiente continental, y es allí donde debería encontrársele, en los libros de las luchas emancipadoras por los derechos de nuestra libertad, porque en últimas es eso lo que son sus libros, un grito de libertad. Mi vida, ha sido un largo combate por la libertad; mi obra toda, ha sido un himno a la libertad.

11 de marzo de 2015
    Hay bohemios que se consagraron como poetas con un libro de poesía; hay escritores que se consagraron con un libro de aforismos; hay filósofos que se consagraron con un discurso; megalómanos con un diario; santos con una confesión y críticos con un elogio; pero hay hombres a los que sólo los consagra su amor a la libertad; esos se llaman: panfletarios; y en nuestra América sólo hubo uno que se elevó hasta la erudición de Séneca y la elocuencia de Cicerón; ese hombre fue: Vargas Vila.
    Vargas Vila; el más grande escritor de Hispanoamérica; tan grande, que desafiaba, no solamente a los filólogos, críticos y gramáticos, sino también a la misma Academia. Uno como él puede ser todo lo egotista, lo afectado o lo indignado que le dé la gana. No puedo decir que todos amasen mi personalidad de escritor, pero sí puedo decir que todos conocían mi personalidad de escritor.


10 de marzo de 2015
    La impertinencia no pasaba de ser en Vargas Vila, un talento; el genio, en él, era la elocuencia.

    A nadie se le había ocurrido decir que el panfletario del modernismo era un dandy, y un  esteta. Y que fue el panfletario más brillante de la era moderna. A eso es lo que yo le llamo: ser elocuente. Un hombre elocuente que no se cansó de repetir el mismo discurso: un discurso fiel a sus sueños de libertad. El individualismo, la anarquía, la historia, la palabra, la misoginia, el suicidio, la voluptuosidad, el libelo, la poesía, los héroes, y la pasión de esos héroes; todo ello hizo de Vargas Vila, un comprensivo. Hablando de pasión, y séame permitido hacer un paréntesis, les comparto de la Teoría de la ambición, esta máxima aforística: para formular correctamente una teoría, se ha de llevar el análisis hasta la acción primera de las pasiones. En otro artículo hablaremos de moralistas franceses. Sigo, sin olvidarme de la importancia de grandes libelistas que han sido tan decisivos en la carrera bélico-literaria emprendida por Vargas Vila hace 130 años. Otro paréntesis: De pie para cantarlo, que es la Patria, como dijo el vate olímpico Olegario Andrade. Así escribía Vargas Vila en 1885: En política, como en filosofía, la pugna de ideas ha sido constante entre los hombres de la Razón: y los del dogma, del doctrinarismo y la autoridad, los del derecho divino y del derecho popular, es decir, entre la escuela liberal y la escuela conservadora. Uno de ellos, Juan Montalvo, del que Los capítulos que se le olvidaron a Cervantes, son uno de los más grandes logros literarios en la historia de la literatura castellana; el escritor y filólogo ecuatoriano, imitó por cerca de cuatrocientas páginas el estilo de Cervantes. Una copia que hoy lo tiene como uno de los más grandes estilistas de la literatura hispanoamericana. A eso también le llamo yo, modernismo. Como ensayista, Montalvo no tiene nada que envidiarle a Martí, es por eso que para mí, Juan Montalvo es el primero de nuestros escritores modernistas; y la razón es muy sencilla: su lucha de emancipación con la pluma, no tuvo precedentes en la historia. Sin embargo hay escritores que son mucho más generosos con nuestro panfletario, y lo colocan así por encima de Montalvo, cuyo interés literario hoy en día es meramente histórico-político, aseguran. En el caso de Vargas Vila, su campaña anti yanqui está más vigente que nunca en aquellos que no vislumbran la existencia de un imperio del tercer milenio. De nada sirve la anarquía sino se sabe por qué se es anarquista. Vargas Vila fue un individualista. Y de eso dan fe sus obras de meditación. Por eso fue un solitario, o como bien lo sintetizó su amigo y filósofo progresista Pompeyo Gener: un comprensivo. Un compresivo que escribió novelas voluptuosas. En ellas se complacía en decir: no hay nada más voluptuoso que corromper un alma. En muchas de esas almas, el demonio vivía  en el espíritu de una mujer. Y así fue muchas mujeres, como Valera; o una que lo sintetizara todo como la señora Bovary. Y Vargas Vila fue la maestra de escuela, el Ibis pecaminoso, Delia, Eleonora y Germania, y cuanta condesa, cocotte o madeimoselle  se le atravesara en el camino, como la juvenil poeta Silvia Krauss Salvatti.


MÁS PENSAMIENTOS DE VARGAS VILA


Las mujeres y la vida, para amarlas,
Es necesario dominarlas;
De lo contrario seremos unos esclavos;
Y un esclavo es siempre despreciable,
Sobre todo para aquel que lo esclaviza.

***
Todo lo dulce me es repugnante;
Ese placer de cerdos empeñados en devorar una colmena.
Yo amo las cosas acidas o amargas,
Como el dolor, que fue el gran alimento de mi alma.

***
Tanto la duda, como la virginidad, son estériles.

***
Es en la parte ignorada de nuestro yo,
Donde residen todos nuestros instintos.

***

Rousseau se empeñó en pintar el hombre de  la naturaleza,
Y Chateaubriand en deformar la naturaleza del hombre.

***
La virtud…
Yo quisiera saber lo que es la virtud…
Esa mentira hipócrita y audaz
Que florece en todos los labios
Y no crece en ninguno de los corazones.
¿Cuándo seré yo bastante vil para predicar la virtud,
Y bastante corrompido para practicarla?

***
El alma humana es el más vasto escenario
Que el destino haya formado
Para la realización de sus más crueles tragedias;
El horror sicológico supera a todos los horrores.

***
Yo fui un Hombre-Idea.
El amor a los ideales fue en mi violento,
Lleno de una furia que podría llamarse salvaje.
Ningún otro escritor esbozó los gestos atrevidos que yo esbocé.

***
Mis manos cruzadas sobre mi pecho, inmóviles y pálidas,
Serán la única cruz que se posará sobre mi corazón.

***
Para no entristecer a los otros,
fingimos no estar tristes,
Y sonreímos a falta de poder llorar.
Esa sonrisa, es como un arco iris
Hecha de la condensación
De todas las tormentas.

***
Una personalidad vigorosa, es como un gran río:
Todo lo invade y todo lo fecunda.
Una personalidad débil, es como un agua muerta,
Que no sabe sino agotarse y agota todo lo que toca
Con sus aguas quietas y mefíticas.

***
Hice muy bellos versos, y no pude nunca hacer buenos versos.
Aún más que el poema bucólico, o el poema romántico,
El epinicio, me sedujo, con sus estrofas marciales,
Y fue el corcel alado de mi musa;
Canté las batallas y los héroes;
Homericé con furor, pindaricé con delirio.

***
Vive tu vida; vive tu instinto;
deja tu pensamiento expandirse y evolucionar
según la ley íntima de sus elementos constitutivos.

***
Cada uno tiene la Estética de su propio temperamento. 

 ***
A los genios se les pide constantemente abdicar de su orgullo;
¿Por qué no se les pide a los mediocres legitimar el suyo?
Pero, ¿cómo pedírselo si son siempre los mediocres los que piden la abdicación del Genio?
Ellos, que no se encargan de legitimar sino su Envidia.

 ***
Nada es igual al odio que la naturaleza profesa al hombre;
todo su esfuerzo tiende a hostilizarlo y a destruirlo.
Es verdad que le da sus frutos, pero, para envenenarlo lentamente con ellos;
y el triunfo final es de la naturaleza;
ella nos mata, para alimentarse de nosotros en pago de los alimentos que nos dio.

 *** 
Yo no sé por qué ciertos poetas,
no reservan la última cuerda de su lira,
para ahorcarse con ella;
así se levantarían un poco, siquiera, a la altura de la horca.